A todas nos encanta lucir un cabello brillante, alisado y sedoso, pero no todas contamos con nacer con una caballera así. Sin embargo, gracias al avance de la tecnología la solución es muy simple: usar una plancha de cabello.
Ahora bien ¿realmente los pros valen más que los contras de su uso? Bueno, a continuación te vamos a dar una lista de ambos para que seas tú la que decidas si las planchas de pelo son lo que necesitas.
Pros y contras de usar una plancha de cabello
Liso cuando quieras.
Una de las grandes ventajas de usar una plancha de cabello es que puedes tener el pelo liso cuando te quiera e incluso, si duermes en una posición que “corte” o deje ondulado tu cabello con un retoque rápido todo está estará en orden.
Es rápido.
A diferencia de otros peinados, con los que puedes pasar horas y horas en una silla, plancharte el cabello puede ser cuestión de minutos, eso sí, dependerá de qué tan rebelde sea tu cabello y del largo que lo tengas.
Toda una variedad de peinados.
Si tu plancha no es ancha, sino fina ¡tendrás de las mejores suertes! Ya que no sólo podrás alisar tu cabello, sino realizarle hondas que parezcan naturales y hacer varias combinaciones: como semi lizo con hondas, liso adelante con hondas, etc.
No es permanente.
Si te pintas el cabello hasta que no apliques otro tinte será el mismo color e incluso a veces puede llevarte tiempo conseguir otro look, con una plancha no: durará hasta que nos bañemos.
Pero esto también es una desventaja: al no ser una solución permanente, el alisado no durará mucho tiempo.
A veces no será suficiente.
Si tu cabello es muy rebelde es muy probable que igual necesites asistir a una peluquería donde hay planchas profesionales y personas con años de experiencia para poder alcanzar tu meta de alisarlo y que dure.
Lo mejor es caro.
Las planchas de cabello no son precisamente baratas, y entre más acabados y usos tenga más dinero va a costarte obtenerla. Así que si eres de poco presupuesto a tu bolsillo esto no le va a agradar.
Dañará tu cabello.
Finalmente y para terminar, si no paras de alisar tu cabello y no le aplicas productos para protegerlo del calor, cremas para nutrirlos e hidratarlo ¡alerta! ¡estás dañando tu cabello!
Es natural que al verlo liso queramos usar la plancha mil veces para dejarlo siempre así, pero recuerda que estás aplicando calor sobre tu pelo: este va a terminar quemándose sino tienes cuidado.